Las fugas de agua piscinas son un problema que hay que detectar. Es normal que la piscina pierda un poco de agua por evaporación, chapoteo, y al lavado a contracorriente del filtro. Si habitualmente necesitas agregar más de 5 centímetros (dos pulgadas) de agua a tu piscina por semana, es posible que tengas una fuga. Primero revisa lo más obvio. A continuación, te mostramos una lista de problemas comunes que podrían indicar una fuga. Fugas en el equipo. Revisar el filtro, la bomba, el calentador y las válvulas de la tubería. Revisar además la humedad del piso.
Otros aspectos a mirar son las humedades alrededor de la piscina y del equipo. Busca goteras o espacios por todos los ajustes, skimmers, línea de recuperación, línea de limpieza, luces, escaleras y esquinas. Marca el nivel del agua en la piscina. Ya sea con un pedazo de cinta o con un marcador indeleble, revísala después de 24 horas. La piscina no debe perder más de 1/2 cm (1/4 de pulgada) por día, de lo contrario, hay una fuga. Encuentra la ubicación de la fuga. Con la localización de tuberías metálicas y arreglas la fugas. La mayoría de las fugas en las piscinas se pueden detectar y reparar sin interrupciones por ejemplo con aire comprimido para hacer presión en la tubería.